Como cada año, ayer, sábado, se realizó la Hora del Planeta bajo el eslogan “Demos forma a nuestro futuro”. Esto con el ansiado retorno a las actividades presenciales que tuvieron una pausa los años anteriores, respetando las normas de bioseguridad.
La premisa es de reforzar el compromiso de cuidar la naturaleza mediante un llamado a todos los sectores a trabajar juntos por ese objetivo. Y, para convocar la atención de la población hacia esta meta, World Wild Foundation (WWF) por sus siglas en ingles realizó una serie de eventos.
La idea principal según Samuel Sangüeza Pardo, representante de WWF en Bolivia es la de “convocar hacia la acción conjunta, porque es tarea de todos cuidar y preservar el planeta para un futuro donde las personas y la naturaleza prosperan juntos. Seguiremos propiciado espacios que permitirán a todos tomar acciones y expresar su compromiso por la naturaleza y la vida en el planeta”, agregó.
El apagado simbólico de luces sucedió a las 20:30, de manera sincronizada en diversas ciudades y poblaciones del país. En Santa Cruz, una caravana de bicicletas partió desde el Cristo Redentor llegando hasta el Boulevard de Las Brisas Centro Comercial, donde se inició con el acto central del apagado de luces ante la presencia de ejecutivos de WWF Bolivia, autoridades locales, artistas y una gran cantidad de público asistente.

También, más de un centenar de acciones similares se replicaron en lugares como la Plaza 10 de Noviembre de la ciudad de Potosí; en las plazas principales de Oruro; y en el Parque Lincoln, en Cochabamba, entre varios otros sitios.
Previo a esta fecha, se realizaron actividades en varias ciudades y municipios en las que la población participó de manera activa. Se tuvieron maratones, conversatorios, disertaciones, exposiciones fotográficas, talleres, ferias, limpieza de sitios como el río Piraí, arborización en los barrios y recolección de botellas.
La Hora del Planeta es un movimiento ambiental global que inspira a las personas para actuar en favor del planeta.