Ante el conocimiento de la crítica situación del hogar Teresa de los Andes, y con la finalidad de solucionar el problema del cierre, el gobernador Luis Fernando Camacho firmó la tarde del lunes un preacuerdo con la fundación Hombres Nuevos y la
Alcaldía de Montero para trasladar al predio de la institución católica, a los internados del hogar Teresa los Andes y darle continuidad a su atención.
Dentro de la carta de intenciones, la Gobernación se compromete a gestionar, en el marco de sus competencias, el apoyo para que el hogar tenga atención en salud especializada.
La Secretaría de Salud y Desarrollo Humano, de la Gobernación, junto con la Alcaldía montereña, harán posible que personas con discapacidad de escasos recursos puedan tener un lugar digno y con las mejores condiciones para su atención.
En la reunión con el representante de la Fundación Hombres Nuevos, monseñor Nicolás Castellanos y el alcalde de Montero, Regys Medina, se coordinaron las acciones a seguir en la búsqueda de la solución definitiva, ponderó la primera autoridad del departamento.
CRONOLOGÍA
El Hogar Teresa de los Andes, centro ubicado en las cercanías de Cotoca, que desde hace más de 30 años brinda apoyo a personas con discapacidad, cerró oficialmente sus puertas debido a una fuerte deuda que no puede ser cubierta.
En su momento, Fausto Salamanca, director del Hogar, explicó el porqué debían cerrar sus puertas el 31 de marzo, señalando que esto obedecía a que tenían una deuda de $us 1 millón yno habían podido cubrirla.
“Resulta que la población vulnerable y abandonada debería recibir ayuda directa del Estado, pero nosotros hemos buscado esa ayuda desde 2003, los hermanos se reunieron con autoridades para gestionar becas alimentarias y un aporte fijo, porque no era un simple hogar de niños, sino un centro para atención de discapacidad profunda.
Nuestra institución para que funcione normalmente necesita un presupuesto mensual de 35.000 dólares, nosotros no alcanzábamos a recibir ni 10.000 dólares.
A mucho esfuerzo, realizando actividades, rifas, cenas y no dio. Algunas ONG nos ayudaban, pero ya se fueron retirando”, explicó el religioso.
Salamanca dijo que las ONG siempre aportaron, pero en su opinión la ayuda la debe dar el Estado. “Estos chicos llegaron al hogar remitidos por las autoridades.
$us 35.000 mensuales es una renta gigante. Tenemos una deuda actual de casi un millón de dólares. El hogar Teresa de los Andes no tiene bienes materiales ni económicos”, lamentó.
OBLIGACIONES
Las obligaciones que tiene que cumplir este centro contemplan el pago de sueldos a 54 trabajadores, además de las vacaciones. Los 89 niños con discapacidad que eran atendidos, tendrían que ser reubicados en otros centros a cargo de la Gobernación.
El hogar, situado a pocos kilómetros de la ciudad en Cotoca, brindaba atención a personas con discapacidad entre los 5 a 50 años.