El Tribunal Primero de Sentencia de La Paz determinó nuevo receso en el juicio oral en el caso Golpe de Estado II, por el que la exlegisladora Jeanine Áñez es investigada por los presuntos delitos que cometió cuando era segunda vicepresidenta del Senado, para posteriormente asumir en 2019 la presidencia del Estado de forma inconstitucional.
“El Tribunal va a disponer un receso hasta el día de mañana a horas 14.00, en virtud en que mañana tenemos programado una audiencia de juicio oral”, explicó el presidente del Tribunal Primero de Sentencia.
La autoridad jurisdiccional determinó que este receso durará hasta las 14.00 horas del miércoles.
Durante la audiencia de este martes, el Ministerio Público y el Ministerio de Gobierno expusieron sus alegatos y fundamentaron su acusación contra Áñez, en esta oportunidad se contó con la presencia de un representante de las Naciones Unidas.
Según la fundamentación de la Fiscalía, los exjefes del alto mando militar tenían un plan preparado para que Áñez tome el poder.
Por su parte, la abogada del Ministerio de Gobierno, tras la fundamentación de las pruebas en el caso, solicitó que los demandados sean sentenciados a 15 años de cárcel.
Se prevé que mañana la Procuraduría y la Cámara de Senadores expongan por su parte sus alegatos.
“Está a las puertas de una sentencia”
Luis Guillen, abogado de la expresidenta Jeanine Áñez, afirmó ayer, martes, que la exmandataria está “a puertas de una sentencia” que se prevé sea dictada por el juez del Tribunal Primero de Sentencia hasta este miércoles.
“Yo creo que hasta el miércoles que habrá una sentencia probablemente, pero definitivamente hay velocidad para dictar sentencia (…). Estamos a puertas de una sentencia que es anticipada, una sentencia que es dirigida, un proceso que no ha cumplido con las debidas instancias y no ha cumplido con el debido proceso”, indicó el jurista en declaraciones a Urgente.bo.
Carolina Ribera, hija de la exjefa de Estado, manifestó que el Gobierno quiere a “su madre como un trofeo” para todos los bolivianos que piensan diferente.
“No tenemos por qué los bolivianos sufrir de injusticias. Yo no quiero que ninguna otra mujer sufra por lo que está atravesando mi madre, solo por el hecho de haber cumplido por su deber”, dijo.
En la audiencia por el caso Golpe II, se la vio a la expresidenta cansada y con un médico que le controlaba la presión.